El tema de residuos en avicultura constituye uno de los principales problemas productivos a abordar por nuestro sector, para lograr la sustentabilidad de la avicultura.
¿De qué se trata?
Este tema se trata de las consecuencias del calentamiento global (cambios régimen de temperaturas, lluvias, etc.), la potabilidad del agua (por contaminaciones), aumento del desafío de enfermedades humanas y animales (por plagas, contaminaciones, etc.) y la pérdida de calidad de vida de las poblaciones cercanas a establecimientos avícolas (por olores, plagas, etc.).
Esto nos lleva a tener que hacer una gestión responsable de los residuos avícolas. Por lo tanto, es una cuestión de responsabilidad social, empresarial y profesional; es un tema ético y compromete nuestro futuro.
Toda la avicultura está englobada: la actividad en granjas, incubadoras, plantas frigoríficas, plantas de ovoproductos, de alimento, de huevo, de clasificado/empacado de huevo y el transporte entre ellas y con/de terceros. Hablamos de todas las actividades que están involucradas, pues generan residuos por pollinaza (cama de aviario), gallinaza (excreta de postura), aves muertas, descartes, desechos y pérdidas, emisiones gaseosas, sólidas y líquidas, fabricación del alimento, procesamiento de aves y de huevo, utilización de productos biológicos y domisanitarios, el transporte y la propia actividad humana.
Todas esas actividades producen un impacto en el ambiente que no es solo efecto de la respiración de las aves en un lugar de alta concentración de ellas, porque si hay un buen contorno vegetal, está compensado ecológicamente por la actividad biológica y la interacción entre animales y plantas. Y, ¿por qué producen impacto en el ambiente? Porque hay generación de residuos sólidos, líquidos, gases, agua, energía, proliferación de plagas, emisión de ruidos y olores.
El tema del agua nos preocupa, porque en lo que refiere a su consumo, estamos compitiendo con otras producciones, tanto por el consumo de agua a nivel humano como por actividades agrícolas. El consumo de agua animal en lugares confinados es un alto consumo en un determinado punto y origen puntual, donde se compite con poblaciones cercanas que acceden a la misma fuente de agua. Asimismo, hay producciones agrícolas intensivas que también compiten con la misma fuente de agua.
Inventario ambiental de la avicultura
Tengan en cuenta que los dos bienes más escasos que vamos a tener en el futuro son la superficie cultivable y la provisión de agua dulce, dos elementos que debemos saber administrar. Por eso, es conveniente -en este caso- elaborar un inventario ambiental. En el Cuadro 1, se presenta un compendio de todos los residuos para quienes quieran hacer un inventario ambiental, donde se muestran los residuos sólidos, qué tipo de actividad es, en qué tipo de ambiente se encuentran, etc.
Esto es solamente en la parte de las granjas, pues existe otra parte que es la de incubación, donde podemos encontrar más residuos en etapas de incubación, faena, clasificado y quebrado que tienen actividades y consecuencias; algunos de estos también tienen consecuencias luego en la contaminación de fuentes de agua (Cuadro 2).
Si hacemos premezclas en una planta de alimento balanceado, tendremos envases de insumos, rodenticidas, insecticidas, etc. Si estamos realizando las buenas prácticas de fabricación de alimento y cada tanto limpiamos las tuberías, en estas vamos a encontrar restos de polvo que con la humedad quedan adheridos a las tuberías. Todo aquel que haya puesto el sistema HACCP en una planta de alimento balanceado, sabe que está obligado a llevar a cabo este procedimiento porque es una fuente constante de micotoxinas que van contaminando por desprendimientos del alimento. Entonces, hay que tratarlos como desechos, no pueden introducirse al circuito alimentario. Asimismo, tenemos la grasa de las máquinas y distintos elementos a los cuales necesitamos darle un destino como residuo.
Consecuencias
Todo ello tiene un impacto en la salud humana, ya sea por la generación de polvo y partículas suspendidas, microorganismos contaminantes como Coliformes, Estafilos, Estreptococos, hongos, virus, como por endotoxinas, bioaerosoles, amonios, sulfuro de hidrógeno, CO2, CO (Cuadro 3). Los síntomas que se presentan son de tipo respiratorio como tos, flema, irritación de ojos, disnea, congestión y fatiga, respiración dificultosa, estornudo, cefalea, así como reducción de función pulmonar en trabajadores avícolas (principalmente desórdenes obstructivos). Todo esto resulta en pulmones hipersensitivos, constricción bronquial, bronquitis, asma y otros cambios inmunológicos.
Por otro lado, también causan impacto en la salud de las aves por la generación de los mismos factores contaminantes que en los humanos. A consecuencia de ello, las aves presentan Queratoconjuntivitis (Bullis et al., 1950), susceptibilidad a aerosaculitis y Newcastle (Kling & Quarles, 1974; Anderson et al., 1964), disminución del crecimiento (Reece et al., 1980; Caveny & Quarles, 1978), reducción de la postura (Deaton et al., 1982), infiltración linfocitaria en ojos (Patterson et al., 2000) y respuesta olfatoria y de comportamiento (Wathes et al., 2004).
¿Qué hacer?
Necesitamos informarnos para empezar a conocer, pues no vemos el problema porque no lo queremos ver o porque no nos importa; esto sí es un gran problema.
La avicultura en conjunto ha comenzado a preocuparse y ya se comienza hablar del tema. En ese sentido, se llevó a cabo el Taller de Residuos de la Avicultura en Porto Alegre el 2007, el Congreso Centroamericano de Avicultura en Managua el 2008 y el VIII Seminario Internacional AMEVEA Perú en 2015. La solución comienza cuando reconocemos el problema y estamos dispuestos a hacer algo para solucionarlo.
A nivel mundial este tema se está poniendo cada vez más intenso, y por su parte, el Perú está preocupándose a nivel de estado y está en camino de dar un paso adelante con respecto a este tema.
En las granjas
La responsabilidad profesional no termina solamente en sacar la gallinaza.
Guano: Un destino final es en el mejor de los casos su uso directo (sin procesar) como fertilizante natural, hay cada vez más problemas para trasladarlo fuera de las granjas (fincas) y hay posibilidades de procesarlo en forma amigable con el ambiente.
Cama: Un destino usual es su uso directo (sin procesar) como fertilizante natural o enmienda de suelo, muy pocos realizan un procesado, aunque hay posibilidades de procesarlo en forma amigable con el ambiente. En muchos casos se utiliza como alimento de rumiantes y hay cada vez más problemas para trasladarlo fuera de las granjas (fincas).
Aves muertas: No deberían salir de la granja si la mortalidad fue por razones zoonóticas, muy pocos realizan un procesado, aunque hay posibilidades de procesarlo en forma amigable con el ambiente. En muchos casos se utiliza como alimento de cerdos, en muchos otros se entierra cerca de la superficie, deberían desecharse en forma apropiada.
Futuro de la avicultura: Debemos tratar adecuadamente los residuos, ya que si no lo hacemos, en algún momento no se podrá continuar produciendo, pues la presión de la comunidad obligará a cerrar las granjas; hay intereses inmobiliarios o políticos que interfieren en una evaluación objetiva del problema y de la aplicación de posibles soluciones.
Por otra parte, sabemos también de algunos destinos que se le está dando a estos desechos (guano, aves muertas y cama), pues existen muchas alternativas (Cuadro 4).
Financiamiento
Existe financiamiento internacional para poder mejorar las prácticas de manejo de residuos y hay una serie de programas para ser utilizados y aplicados en las granjas.
Bonos de Carbono %u2013 metodologías aplicables:
- AM006 %u201CReducción de emisiones de GEIs en sistemas de manejo de estiércol’
- AM016 %u201CMitigación de GEIs a partir de la mejora de sistema de gestión de estiércol animal en operaciones confinadas%u201D
- ACM 0010 %u201C Reducción de GEIs%u201D
- AMS.III.D %u201CReducción de metano%u201D
- AMS.III.E %u201CReducción de otros GEIs%u201D
- CFI: Financia a tasa negativa del 25%
BIRF: Financiamiento a gobiernos para el apoyo técnico y financiero
¿Qué necesitamos saber?
Como profesionales necesitamos informarnos acerca de todas las opciones disponibles para el procesamiento de los desechos y emisiones, alternativas más económicas y prácticas para cada tipo de granja, indicadores ambientales para este tipo de producción y alternativas de financiamiento local o regional.
Según Liang et al., 2003, la emisión de ponedoras de NH3 en un galpón convencional es de 386 gramos/gallinas/año, y en un galpón automático con aireadores es de 34 gramos/ gallinas/año.
Además, sabemos que podemos manejar el amoníaco ambiental minimizando la humedad excedente, por la humedad fecal, el manejo de los bebederos, agua exógena (suelo, superficie y lluvia) y ventilación apropiada.
En lo que refiere al manejo de polvo, tenemos alternativas como la reducción de emisiones, la remoción del guano, limpieza periódica de galpones, aspersión de aceite y aspersión de aceite más agua que tiene importantes reducciones de polvo (23-79%), NH3, H2S (20 a 30%), y olor (promedio 50%). Otras formas de manejar las reducciones de emisiones de polvo son utilizando filtros de biomasa, ventilación en temporada fría (reduce el polvo 50 %u2013 80% y el olor 40 %u2013 90%), colocando cortinas verdes [reducción total de polvo = 55% (n=10)].
Respecto al amoníaco, podemos manejarlo controlando la actividad de la uricasa en la masa emisora de N (pollinaza o gallinaza), mediante productos químicos simples y de oferta constante como los sulfatos de Zn, Na, Fe, Al, sus mezclas con ácido sulfúrico, ácido fosfórico y superfostatos. Asimismo, replanteando la formulación de la dieta, enfocándonos en la biodisponibilidad de los aminoácidos (usando por ejemplo aminoácidos de alta digestibilidad o enzimas que actúan sobre la dieta). Y también, controlando los factores que influencian la transformación del ácido úrico (temperatura, pH, actividad acuosa y nivel de humedad).
En cuanto al fósforo, podemos manejarlo cambiando el origen o calidad del aporte (con preferencia el uso de harinas de origen animal: pescado, vísceras, sangre, etc.), no excediendo el aporte requerido, mejorando la biodisponibilidad utilizando aditivos (por ejemplo: fitasas) y enzimas.
De la misma manera, tenemos que preocuparnos por los residuos tecnológicos como las agujas, embalajes, frascos, restos de productos vencidos, etc. Para ello, debería contarse con una reglamentación nacional que contemple la disposición final de los embalajes de productos domisanitarios, medicamentos veterinarios y biológicos de la avicultura, así como el responsable de su ejecución, para lo cual se debe contar con el apoyo de instituciones avícolas de cada país, empresas avícolas para la recolección del material con destino a la central de proceso, y proveedores avícolas para el retiro y procesamiento de los mismos.
Normalmente, las plantas de eviscerado son las plantas de procesamiento beneficiado del pollo, pavo u ovoproductos. Hay dos parámetros importantes que son la demanda biológica de oxígeno (DBO) y la demanda química de oxígeno (DQO) en los efluentes líquidos (Cuadro 6).
Existen variaciones de tratamientos según los microorganismos y en el nivel de temperatura en el que actúan: termofílica, mesofílica y psicrofílica; también está en el caso de la biodigestión. Podemos combinar estos tratamientos, lo cual en plantas de beneficio se hace constantemente. Hay una puesta en valor de los desechos; por ejemplo, si hay explotaciones grandes en zonas que están aisladas, podemos ser autosuficientes en energía eléctrica y calórica a través del uso eficaz de los residuos mediante dichos tratamientos y/o apoyo internacional.
Existen formas de utilizar fertilizantes. Hay que tener en cuenta que a veces los suelos no toleran una carga alta de gallinaza por mucho tiempo, ya que esto termina afectando la cosecha. Por eso, ya sea a nivel de granjas o a nivel de plantas de procesado, lo importante es lograr una producción más limpia. En este sentido, tenemos que ser y actuar conscientemente, no en automático.
Reflexión y conclusiones
Nos encontramos en un mundo globalizado, donde tarde o temprano este tema nos alcanzará y pondrá en riesgo la continuidad de nuestro negocio. Si queremos aumentar nuestra producción en base a la exportación, será una exigencia a cumplir. Es de persona inteligente anticiparse a los hechos y preparase.
El tema de residuos en avicultura constituye uno de los principales problemas productivos a abordar por nuestro sector, para lograr la sustentabilidad de la avicultura. Las tecnologías, recomendaciones de manejo y las herramientas están disponibles, lo que falta es un análisis objetivo de cada explotación y la firme decisión de encarar las tareas de mitigación que se requieren.
El dilema a enfrentar -por los profesionales que trabajan en la avicultura- es resolver el conflicto ético que se genera cuando sus jefes no acompañan -por razones económicas- las soluciones propuestas, aunque éste sería tema de otro debate, ya que este conflicto no solo se produce en el tema de residuos, sino también en la denuncia de enfermedades zoonóticas a las autoridades, el uso de antibióticos dentro de la ventana de retiro, entre otros asuntos.
Fuente: Actualidad Avipecuaria