En el presente artículo se muestran algunos de los diferentes defectos en la cáscara de huevo y sus causas
Huevos con grietas o agujeros: La reducción de la dureza de la cáscara es debida a calor excesivo, agua salobre, deficiencias en calcio o vitamina D e infecciones micóticas. La incidencia aumenta con la edad de las gallinas.
Huevos sin cáscara o en fárfara: El contenido del huevo sólo está protegido por la membrana externa. Los huevos en fárfara se producen a causa de:
Glándula cascarógena inmadura en ponedoras jóvenes
Deficiencia en calcio y vitaminas E, B12 y D, así como fósforo y selenio.
Ciertas enfermedades como: Enfermedad de Newcastle, Bronquitis infecciosa aviar, Influenza aviar o el síndrome en la caída de puesta.
Parásitos o micotoxinas
Estrés que causa una puesta prematura
Huevos deformados o irregulares: Se refiere a los huevos que difieren de la forma normal o su tamaño es demasiado grande o pequeño. Estos huevos pueden resultar de: Glándula cascarógena inmadura, enfermedades (Bronquitis infecciosa aviar, Enfermedad de Newcastle y Laringotraqueitis infecciosa aviar) o también a causa de estrés o superpoblación en el gallinero.
Huevos asimétricos o con abolladuras: Las cáscaras de estos huevos se agrietan durante la calcificación y esta grieta se repara mediante el depósito de una capa de calcio encima, antes de la puesta. Esto suceso suele ocurrir cuando la iluminación es incorrecta (programas lumínicos superiores a 15 horas), existe hacinamiento o estrés y aumenta su incidencia con la edad.
Huevos corrugados o con cáscara ondulada: Se trata de huevos totalmente arrugados, esto sucede cuando la membrana del huevo es más delgada de lo normal, fruto de una doble ovulación. Al existir dos yemas, la membrana tiene que estirarse más para cubrir el contenido extra del huevo, por lo tanto el huevo no será suficientemente redondeado y la membrana será corrugada. En ella se depositará el calcio y dará lugar también a una cáscara ondulada. Las posibles causas son:
Huevos de tamaño extra grande, normalmente huevos de dos o múltiples yemas
Enfermedades: Enfermedad de Newcastle y Bronquitis infecciosa
Uso excesivo de antibiótico
Deficiencia en cobre o exceso de calcio
Glándula cascarógena defectuosa o factores hereditarios
Fuente: http://www.veterinariadigital.com/articulo.php?id=240