Expertos comparten las últimas investigaciones sobre la salud intestinal de las aves

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Una mayor información sobre el funcionamiento del intestino de las aves de corral permite a la industria avícola abordar mejor sus desafíos. La industria avícola enfrenta muchos desafíos, en parte debido a llevar la producción a sus límites, pero este enfoque no es incorrecto. Más bien, es la forma en que el sector necesita seguir moviéndose y ya se están encontrando soluciones.

Esto es lo que los delegados escucharon en la sexta Conferencia Internacional sobre Salud Intestinal de las Aves de Corral (IHSIG), celebrada en Roma a principios de abril. Las nuevas tecnologías y su aplicación en la producción avícola permiten una comprensión cada vez mayor de la salud intestinal, y los temas que se abordan en el evento van desde la identificación de biomarcadores para la salud intestinal hasta el manejo de las respuestas inmunes intestinales y la identificación de aditivos ideales para piensos.

Con ocho presentaciones principales, el evento también brindó la oportunidad de realizar presentaciones abstractas más breves y se examinaron varias áreas de salud intestinal, con el concepto de One Health central en las discusiones.

Interrupción de la simbiosis. En referencia a los avances en la investigación en seres humanos, el orador principal Joel Dore, del instituto de investigación francés INRA, señaló que hay 100 billones de bacterias en cada ser humano, así como fagos, hongos y otros organismos. Nos convertimos en “microbianos” al nacer, continuó, y agregó que el sistema inmunológico reconoce a la microbiota como “parte de uno mismo”.

Si bien la ciencia pudo haber tenido éxito en controlar mejor las condiciones infecciosas en la población humana, ha habido un aumento en las condiciones inmunes, y ahora se cree que 1 de cada 4 personas está afectada. Estas condiciones crónicas han ido creciendo sin control en los últimos 60 años, y la longevidad humana ha comenzado a disminuir en los países desarrollados.

Mucho ha cambiado en la forma en que vivimos en los últimos 50 años que ha afectado la microbiota. Tomemos, por ejemplo, el nacimiento. En algunas áreas, las cesáreas ahora representan 9 de cada 10 nacimientos, lo que rompe la transmisión de microbios de madre a hijo. En lo que respecta a las dietas, el consumo de fibra en Europa, por ejemplo, es mucho más bajo de lo que debería ser.

https://www.wattagnet.com/articles/37390-experts-share-latest-poultry-gut-health-research