Monitorear en la mitad del entore permite tomar medidas a tiempo en rodeos de cría. El monitoreo del entore en la mitad de este proceso reproductivo aporta a los productores valiosa información sobre el comportamiento de los rodeos de cría, útil para tomar medidas a tiempo si se detectan problemas, destacó a El Observador Agropecuario Rafael Carriquiry, técnico del Instituto Plan Agropecuario (IPA) para Rivera.
El médico veterinario explicó que en el norte los entores más frecuentes se cumplen en diciembre, enero y febrero, período que coincide con picos de crecimiento de las pasturas, por lo tanto a esta altura del año se cumple la mitad del entore de los rodeos.
Es un momento muy oportuno para saber lo que está pasando con las vacas entoradas. Explicó que esta altura hay vacas que puedan estar preñadas, o sea las vacas que parieron más temprano y que están en buen estado corporal y también los vientres de la categoría de vaquillonas.
Por otro lado hay otro grupo que han ido pariendo a lo largo de la estación de partos y los celos los manifiestan a partir de enero y eventualmente en febrero. En ese tipo de situaciones se pueden ver los problemas que existen y evaluar las medidas a tomar. Así se puede distinguir las vacas que están ciclando y las que están en anestro (no está ciclando) y tomar medidas por posibles problemas.
Fuente: AgroMeat