Bioseguridad de la granja importante para defender la bandada.

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ATLANTA, Ga. – 1 de febrero de 2018 – ‘Hay algunas enfermedades con las que podemos vivir, pero no la gripe aviar. Es un gran peligro para nuestros medios de vida y nuestras industrias ‘, dijo el Dr. Travis Schaal, GGP / GP y gerente técnico de Hy-Line International, durante el programa’ Defiende la platy: Biosecurity Basics for Poultry and Egg Producers ‘, celebrado en la 2018 International Production and Processing Expo. Schaal discutió la visión de su compañía sobre bioseguridad, que abarca cuatro áreas: conceptual, estructural, operacional y cultural. Hizo hincapié en los 14 puntos del Plan Nacional de Mejora Avícola para hacer cumplir la bioseguridad y expresó la importancia de que los agricultores se comprometan con estos estándares sólidos. Él resumió al afirmar que la cultura requiere tiempo y repetición; las reglas deben cumplirse desde arriba para tener una participación de abajo hacia arriba; las reglas deben ser prácticas y efectivas, no complicadas; y para educar en cada oportunidad.

El Dr. Ben Wileman, director de servicios técnicos globales para Select Genetics, observó que un gran desafío para la bioseguridad de pavos involucraba a personas que viajaban globalmente por vacaciones, viajes de misión o visitas familiares. Señaló que estos viajes pueden tener un impacto en los animales de granja porque los patógenos se transportan de un lugar a otro. Wileman planteó la pregunta: ‘¿Cómo se equilibra la independencia sin afectar negativamente miles de millones de dólares en el comercio?’ Respondió afirmando que necesita equilibrar el comercio con la bioseguridad nacional a través de inspecciones veterinarias, CODEX, OIE y USDA AMS, entre otras organizaciones.

‘La naturaleza humana es tomar rutas fáciles, por lo que la bioseguridad debe ser bastante simple para que la gente lo haga’, comentó Wileman. Señaló que los pavos viven más tiempo que los reproductores y, por lo tanto, tienen más riesgo, especialmente durante su crecimiento máximo. Wileman destacó 14 puntos de bioseguridad que cada granja debe tener en cuenta, incluida la responsabilidad de bioseguridad, capacitación, áreas de amortiguación perimetral y auditoría, entre otros.