10 estudios científicos para entender a los gatos

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No cabe duda de que sean excelentes mascotas, sin embargo, los mininos son mucho más complicados que los perros%u2026

Sin duda, los felinos son una de las mascotas más populares en el mundo, pero así como hay quienes los aman, también existen las personas que no los soportan, y es que los consideran seres hipócritas y sumamente complejos. En realidad, los mininos son animales misteriosos, no suelen mostrar muchas emociones, pero lo cierto es que se expresan en forma muy particular.

En cuanto a su historia y domesticación, las cosas también son completamente diferentes a lo que pensamos, y es que se dice que el gato tiene alrededor de 4 mil años domesticados, es decir, se cree que fueron los egipcios quienes comenzaron con ello.

En el antiguo Egipto los gatos eran adorados, por lo que el rapto y venta de mininos podía ser castigado con la muerte. Si el gato de una familia egipcia moría, sus dueños se afeitaban las cejas en señal de duelo.

En fin, amados por unos, odiados por otros, los gatos son, sin duda, seres espectaculares, por eso y para celebrar el Día Mundial del Gato, en De10.mx nos dimos a la tarea de investigar sobre 10 curiosos estudios que te harán entender mejor a tu minino%u2026

Así que ¡A festejar humanos!

1. No hacen caso a los humanos

En la Universidad de Tokio, se ha llevado a cabo un experimento para tratar de analizar la capacidad de reconocimiento verbal de los gatos. Según menciona Gizmodo, la buena noticia es que los gatos sí que son capaces de distinguir las voces de las personas con las que conviven, en contraposición a las de desconocidos de la misma edad o sexo; pero la mala es que, aunque sí que dan muestras de un mayor reconocimiento, a los mininos sencillamente les da igual que se les llame, y no acuden a la llamada ni responden como lo hacen los perros.

2. Prefieren la carne que los dulces

Hasta hace poco, se ignoraba cuáles eran las razones por las que los gatos domésticos, así como a los felinos mayores, prefieren la carne o el pescado por encima de los alimentos dulces. De acuerdo a una investigación efectuada por científicos británicos y estadounidenses, esta preferencia se debe a que no pueden detectar el sabor del azúcar de los alimentos y bebidas, debido a un defecto en un gen relacionado con las estructuras fisiológicas que permiten percibir estos sabores, por lo que los dulces realmente no les saben a nada. Además, un análisis molecular demostró que los felinos grandes y pequeños comparten esta condición, que puede explicar su comportamiento carnívoro en la cadena alimenticia. Los gatos, incluso cuando tenían una vida silvestre, siempre han preferido una dieta rica en proteínas y muy pocos carbohidratos.

3. Su énfasis en limpiarse después de comer

Seguramente habrás notado que inmediatamente después de comer, los gatos tienden a limpiarse enfáticamente pero, ¿sabes por qué lo hacen? Diversos estudios han demostrado que lo hacen porque es un instinto de supervivencia que ya tienen incorporado en sus genes, la razón es para impedir que los depredadores huelan la comida, evitando de esta forma ser atacados.

4. El maullido encantador de los gatitos

Según el doctor Nicholas Nicastro, de la Universidad de Cornell, en Gran Bretaña, es probable que los gatos que maullaran más placenteramente fueran aceptados dentro la sociedad humana. Después de miles de años de convivencia con nosotros, los gatos han aprendido a elegir los maullidos que más nos complacen, para obtener lo que desean. A cambio, los recompensamos con más caricias, comidas suculentas y el sillón más cómodo. También, el doctor recogió 100 maullidos diferentes de 12 gatos, y después hizo que 26 personas los escucharan y los clasificaran según lo placentero y lo atractivo%u2026

5. Los gatos y el estrés

Por otra parte y de acuerdo a un estudio de la Universidad de Edimburgo, al igual que los humanos, los gatos pueden llegar a sufrir enfermedades relacionadas con el estrés, como dermatitis, cistitis o infecciones en el tracto urinario. Los gatos a veces no se llevan bien con otros gatos, lo que puede provocarles mucho estrés. De hecho, hay más visitas al veterinario por heridas causadas en peleas entre gatos que por otra cosa.

6. Ellos no nos entienden como los perros

Según información de National Geographic, nuestros felinos domesticados no nos entienden como quisiéramos, y es que John Bradshaw, experto en comportamiento felino de la Universidad de Bristol, llegó a esta conclusión después de años de estudiar el comportamiento de los gatos. Existe una enorme cantidad de investigaciones con perros y sobre cómo interactúan con las personas, sin embargo, de los gatos, no sabemos mucho. Evidentemente, saben que somos más grandes que ellos, pero no parecen haber adaptado su comportamiento. Levantar la cola, frotarse cariñosamente con nuestras piernas y sentarse a nuestro lado es exactamente lo mismo que hacen con otros gatos.

7. Los mininos y las cajas de cartón

Un estudio realizado en Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Utrech, ha llegado a la conclusión sobre la fascinación de los mininos con las cajas de cartón, y es que después de evaluar este comportamiento se llegó a la conclusión de que el esconderse en una caja de cartón, reduce notablemente el estrés en los gatos, o al menos eso es lo que se refleja a corto plazo. Además, las cajas de cartón son ideales para los gatos debido a que proporciona a los felinos la posibilidad de arañar, afilando sus garras y marcando su territorio, así lo menciona Gatos Domésticos.

8. Los gatos blancos de ojos azules ¡¿Suelen ser sordos?!

Según menciona Batanga, estudios realizados por genetistas, mencionan que la responsabilidad de la sordera congénita de los gatos de ojos azules recae en la presencia de un gen autosómico llamado W (de White). Este gen tiene como característica particular la potencialidad de tener más de un efecto en el organismo, por lo que en este caso, porta información para el color blanco del pelaje, el azul de los ojos y también de la sordera. Es por ello que estos gatos suelen nacer con una grave degeneración del aparato auditivo, más específicamente en el oído interno, la cual es absolutamente irreversible. Sin embargo, existen casos en los que esto no ocurre o que la sordera no es total. La causa está en el propio gen W, pues no actúa de la misma manera para cada carácter.

9. Gatoterapia

Según una investigación de la Universidad de Maryland, las personas que han sufrido un ataque al corazón y tienen un gato, viven un año más; además, otra conclusión curiosa de las Universidades de Buffalo y California, es que convivir con un perro o un gato baja la presión arterial: %u201CAyudan a superarnos y a reponernos tras la muerte de un pariente o después de un divorcio. Porque no aconsejan, pero tampoco juzgan%u201D. Por si fuera poco, se ha llegado a la conclusión de que el ronroneo sana, y es que las cuerdas vocales gatunas vibran con una frecuencia de entre 25-50 hercios, justo la que se emplea para acelerar la recuperación de las lesiones óseas. %u201CPor eso, se emplea la radiofrecuencia en rehabilitación. Además, ayuda a procesar mejor las emociones, activa el sistema límbico, genera endorfinas y refuerza el sistema inmunológico. Las vibraciones relajan, bajan la presión arterial, estimulan la actividad celular y ponen en movimiento iones y enzimas%u201D.

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10. ¿Cómo ven el mundo?

Hace algunos años, el artista gráfico Nickolay Lamm trabajó con un equipo de biólogos y veterinarios para desarrollar una colección de imágenes que explican cómo es el mundo a los ojos de un gato; las imágenes han sido retocadas de manera que se hace una comparación de la visión del humano en la parte de arriba, y de cómo ven los gatos en la parte de abajo.

Campo visual: De 200 y con una visión periférica (más borrosa) de 30 grados.

Visión Nocturna: Los gatos tienen más bastones que conos, y los bastones captan mucha más luminosidad, siendo esta la razón por la que los gatos ven mucho mejor en la oscuridad.

Enfoque: La razón es, de nuevo, la preeminencia de bastones sobre los conos. Los gatos, capturan imágenes nítidas solamente a la distancia de 7 metros.

Fuente: http://de10.com.mx/vivir-bien/2015/02/20/10-estudios-cientificos-para-entender-los-gatos