A pesar de que los gatos se pueden asear ellos mismos, una que otra cepilladita no les hace nada mal.
1. Como prevención de las bolas de pelo. El cepillado ayuda a recoger el pelo que nuestro gato ha mudado y que si no recogemos con el peine posiblemente sea ingerido mientras el gato se lava a sí mismo. La formación de bolas de pelo en el estómago provoca vómitos y complicaciones veterinarias. Si quieres saber otras formas de prevenirlo puedes leer este artículo.
2. Control de bichos. Si nuestro gato tiene algún bichito como pulgas, garrapatas, piojos o ácaros, nos será mucho más fácil darnos cuenta si lo cepillamos de forma regular.
3. Tu casa estará más limpia. Si recogemos el pelo de nuestro gato de forma controlada no solo se beneficiará nuestro gato sino que también nuestra casa estará más limpia. Esto es más agradable para los gatos y para nosotros y una buena opción para las personas que tienen alergia y conviven con gatos, ya que cuanto menos pelo haya en casa menos síntomas padecerán.
4. Evita los enredos y nudos (lo cual es especialmente importante en gatos de pelo largo) ya que nos ahorrará un montón de tiempo y problemas. Los enredos no son solo antiestéticos sino que son molestos para el gato y pueden llegar incluso a causarles dolor.
5. Gatos más limpios. Sí, aunque nuestros gatos se lavan por sí mismos, en determinados casos como gatos obesos o gatos mayores una ayuda extra les vendrá genial. Si además nuestro gato tiene caspa podemos quitársela con el cepillado usando un cepillo especial (más info).
6. Ayuda a fortalecer nuestra relación con nuestro gato. A muchos gatos les gusta que les peinen. Si tu gato también disfruta cuando le cepillas estarás creando un precioso vínculo con él mientras compartís el momento placentero del aseo.
7. Les ayuda a relajarse. Si nuestro gato disfruta del momento del cepillado, no solo vamos a fortalecer nuestra relación con él sino que en determinadas situaciones estresantes, en lugar de cepillarlos con la frecuencia habitual podemos dedicar un ratito diario al cepillado y además de fortalecer nuestra relación, nuestro gato se relajará y superará con más éxito la situación estresante (el cepillado puede ser especialmente relajante si lo hacemos con un cepillo masajeador).
8. El cepillado ayuda a distribuir bien los aceites naturales que nuestro gato segrega para proteger su pelaje y su piel. Esos aceites hacen que el pelaje tenga un aspecto brillante pero también le protegen de posibles agentes irritantes.
Por supuesto, mientras que algunos gatos adoran ser peinados, otros no pueden soportarlo. Lo ideal es acostumbrarlos cuanto antes y siempre sin forzarlos ni inmobilizarlos. Con paciencia, suavidad, cariño y siempre en el mismo sentido del crecimiento del pelo.
No obstante, algunas de estas tareas pueden realizarse sin cepillar, solamente acariciando, por lo que si nuestro gato no se deja peinar pero podemos acariciarlo y manosearlo un poco, podemos aprovechar estos momentos para revisar el estado general de su pelo o masajear el manto. Comprobar su pelo nos ayudará a detectar cualquier cosa que no deba estar ahí (bultos, rojeces, descamaciones, bichos, etc) y nos servirá como prevención y posible detección de algunos cambios en su estado de salud general.
Fuente: http://www.lalocadelosgatos.com/8-motivos-para-peinar-tu-gato/
