Los investigadores encontraron cepas de bacterias resistentes a los antimicrobianos en el 62.7% de los alimentos para mascotas crudos a base de carne comprados en Suiza. En la revista “Royal Society Open Science”, los científicos de la Universidad de Zurich escribieron que la prevalencia de bacterias resistentes a los antimicrobianos y Salmonella en los alimentos para mascotas de carne cruda representa un “riesgo grave para la salud”, especialmente para bebés, ancianos, embarazadas o personas inmunocomprometidas.
Los investigadores encontraron cepas de bacterias resistentes a los antimicrobianos en el 62.7% de los alimentos de carne cruda para perros y gatos que probaron. Los científicos analizaron 51 variedades de alimentos crudos para mascotas que el equipo compró en Suiza. Los niveles de Enterobacteriaceae, la familia bacteriana de E. coli y Salmonella, excedieron las regulaciones de la Unión Europea en el 72.5% de los alimentos crudos para perros y gatos. Detectaron Salmonella en el 3,9% de las muestras.
Los investigadores suizos descubrieron que muchas de las bacterias resistentes a los antimicrobianos producen ciertas enzimas, llamadas β-lactamasas de espectro extendido (BLEE). Esta enzima otorga resistencia a las bacterias a antibióticos médicamente importantes, llamados cefalosporinas de tercera generación.
- coli que alberga un gen para la resistencia a la colistina contaminó dos muestras crudas de alimentos para mascotas. La colistina sirve como baluarte de último recurso contra las bacterias resistentes a múltiples fármacos.
Alimentos crudos para mascotas probados
En septiembre y octubre de 2018, los investigadores compraron 47 alimentos para mascotas a base de carne cruda de seis ciudades a menos de 300 kilómetros de su laboratorio. Otras cuatro muestras provienen de un productor de alimentos para mascotas de carne cruda a pequeña escala en Suiza. Ese pequeño productor fue certificado en base a los estándares de higiene de análisis de peligros y puntos críticos de control (HACCP).
Todos los alimentos para mascotas de carne cruda utilizados en el estudio contenían solo carne u órganos crudos sin ninguna conservación, como pasteurización o secado. Después de la compra, los productos se transportaron en bolsas que contenían refrigerantes y se almacenaron a temperaturas bajo cero. Las carnes en los productos incluían ganado vacuno, aves, caballos, corderos, alces, avestruces, conejos y peces. Los ingredientes vinieron de Suiza o Alemania.
Referencia: http://bit.ly/2yGToOF
