Ante la amenaza de la Peste Porcina Africana, Bulgaria ha iniciado la construcción de una valla en su frontera con Rumanía para evitar la propagación del virus en su territorio. El avance del virus de la Peste Porcina Africana por el continente europeo tiene a los productores de porcino en jaque. Por ello, Bulgaria ha decidido seguir el ejemplo de Dinamarca y ha iniciado la construcción de una valla en la frontera con Rumania, como medida para frenar la propagación del virus.
La notificación de granjas positivas al virus de la Peste Porcina Africana en Rumanía ha propiciado que su país vecino, Bulgaria, haya construir una valla en su frontera. Según ha comunicado el ministro de agricultura búlgado, Rumen Porozhanov, “la construcción de la valla ha comenzado en dos secciones a lo largo de la frontera terrestre con Rumanía y empezará en una tercera sección“.
El cercado cuádruplo con concertinas cubrirá 133 Km, lo cual constituye una quinta parte de la frontera que separa Bulgaria y Rumanía. De momento, no se han notificado casos de Peste Porcina Africana en Bulgaria, pero el rápido avance del virus ha acelerado la puesta en marcha de medidas como esta, con el fin de evitar el contacto de jabalíes infectados con los cerdos.
Según las estimaciones del Sindicato de Cazadores y Pescadores de Bulgaria, el coste eventual de un brote de Peste Porcina Africana podría ascender a 2.000 millones de levas (1.000 millones de euros) para el sector porcino. Hasta la fecha, se han detectado nuevos casos en República Checa, Polonia, Hungría, Estonia, Lituania, Letonia y Rusia.