El incremento alarmante de las temperaturas hace que los productores dediquen su atención al calor y al estrés que éste produce. Se están desplegando grandes esfuerzos por controlar la temperatura y aumentar la ventilación para asegurarse de que los animales tengan un entorno saludable. Al aumentar la ventilación, los productores deben también vigilar más de cerca lo que respiran sus cerdos. El sistema respiratorio del cerdo juega un papel esencial en la salud del animal y en la rentabilidad global del productor.
Combatir un gas tóxico
La capacidad respiratoria permite que el oxígeno sea debidamente utilizado por los músculos del ejercicio y otros tejidos. Cuando los niveles de gases como el amoníaco no se controlan debidamente, puede presentarse daño de las vías respiratorias y otras enfermedades.
El amoníaco es un gas tóxico que, cuando se encuentra presente en grandes cantidades, puede dañar el revestimiento celular de las vías respiratorias y convertirse en un problema crónico en el corral. El gas no solamente puede producir mortinatos, olor a verraco, mordida de cola y enfermedades respiratorias en los cerdos, sino que además puede crear graves problemas para los cuidadores humanos.
¿De dónde proviene el amoníaco?
El amoníaco se libera de la urea en la orina a través de la actividad de los microbios que degradan los residuos. Tanto la urea como el gas de amoníaco contienen nitrógeno. La urea se produce en los riñones y el organismo la utiliza como medio para excretar nitrógeno.
Existe una serie de factores de manejo que pueden contribuir a la mala calidad del aire y del amoníaco, incluyendo la cama húmeda, falta de ventilación y factores nutricionales como el exceso de consumo de proteína.
Manejo de la calidad del aire
Es importante que sus animales tengan suficiente ventilación. Ello no sólo ayuda a que circule el amoníaco fuera del corral, sino que puede ayudar a mantener la cama seca. Estas son cuatro áreas claves en las que es necesario concentrarse para mejorar la ventilación y mejorar una mala calidad del aire:
- Asegúrese de que todos los ventiladores están trabajando correctamente. Limpie los motores de los ventiladores y asegúrese de que el termostato funcione.
- Examine las aspas y rejillas de los ventiladores para asegurarse de que no estén dañadas ni oxidadas; reemplácelas si tienen 10 a 15 años de servicio.
- Asegúrese de que el equipo de alimentación fuera de las instalaciones esté trabajando correctamente; que las cortinas cierren bien, que se hayan limpiado los residuos y/o el equipo y se han puesto a buen resguardo antes de que caiga la nieve y que se revisen los tanques de propano para asegurarse de que no tengan filtraciones.
- Revise las entradas de aire y la temperatura y pruebe las fuentes de calor complementarias dentro de las edificaciones.
Muchos productores también utilizan tecnologías nutricionales en su alimento balanceado como el extracto vegetal de la Yucca schidigera, el cual puede utilizarse como aditivo para reducir las emisiones adversas de los excrementos y reducir los niveles de amoniaco en el corral de los animales. Si se controla el olor de las excretas y el amoniaco a niveles que permitan mantener la salud respiratoria del cerdo, se genera un medio ambiente más sano, no solamente para el animal, sino también para el productor.
Fuente: Alltech