De seis meses a dos años de prisión y multa de hasta tres mil veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) a quien no realice un adecuado procedimiento en la faena de los animales destinados para consumo.
Con el objetivo de que los productores de carne generen condiciones para que haya un trato digno hacia los animales utilizados para consumo, antes de su sacrificio, el Pleno de la Cámara de Diputados avaló con 358 votos a favor, modificaciones a la Ley Federal de Sanidad Animal.
Los legisladores aprobaron sancionar el sacrificio de animales en los rastros, sin efectuar procedimientos adecuados de insensibilización o aturdimiento previo. Las sanciones van de seis meses a dos años de prisión y multa de hasta tres mil veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), cuando no se realice el adecuado procedimiento.
El dictamen que surgió de dos iniciativas presentadas, una conjuntamente por el PAN, PRD, Morena y MC, y otra que propuso la bancada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), se turnó al Senado de la República para su análisis y eventual ratificación; el documento establece las definiciones de: animales destinados para abasto, insensibilización o aturdimiento y sacrificio humanitario, así como cambiar el concepto de salario mínimo por el de UMA.
Los legisladores proponentes explicaron que el principal objetivo es abatir la crueldad en las prácticas documentadas de sacrificio que utilizan los humanos sobre los animales utilizados para el consumo, asimismo, reconoce las normas éticas que deben seguirse en dicho acto, “sobre lo cual la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ha establecido que es una obligación el sacrificar de una forma humanitaria a los animales destinados al suministro de productos comestibles y de subproductos útiles”, sostuvieron.
Al respecto la diputada de Movimiento Ciudadano, Verónica Delgadillo detalló que en México, según el INEGI cada año se torturan en promedio siete millones de animales de granja en los rastros, mismos que antes de ser sacrificados para un consumo humano, “son torturados, lastimados, violentados y tratados de manera inhumana, esto además de ser injusto, es indignante”, mencionó.
Fuente: AgroMeat
