La industria avícola debe comenzar a adaptarse a la demanda de pollo criado sin antibióticos, dice un orador de IPPE. Durante cincuenta años, el uso de antibióticos ha sido una forma comprobada y verdadera de mejorar la salud animal, la uniformidad y la eficacia de la producción en la industria avícola, dijo Brett Lumpkins, PhD, Southern Poultry Research.
Pero Lumpkins cree que ahora es ‘el principio del fin’ del uso de antibióticos en la producción avícola, y la industria necesita adaptarse a nuevos métodos de producción, dijo durante la charla ‘Cerrando la brecha en alimentar a los broilers restringidos con antibióticos’, celebrada en enero 31 en la International Production and Processing Expo (IPPE) en Atlanta, Georgia.
La tendencia europea está acumulando vapor en EE. UU. Lumpkins notó que el alejamiento del uso de antibióticos tenía sus orígenes en Europa. Suecia fue el primero en eliminar y prohibir los antibióticos de la alimentación del ganado, en 1986. Dinamarca siguió en 1994. Poco después, más países de la Unión Europea comenzaron a sentir la presión del consumidor de la crianza sin antibióticos, y enero de 2016 marcó el inicio de la prohibición de la alimentación con antibióticos en la UE.
‘¿Es este el comienzo del fin?’, Preguntó Lumpkins retóricamente. Él cree que sí. ‘Como la mayoría de las cosas que suceden en Europa, parece encontrar su camino hacia [a los Estados Unidos]’, dijo. Chick-fil-A anunció su plan de servir pollo sin antibióticos en 2014, y poco más de un año después, McDonald’s anunció un plan para eliminar el uso de pollo criado con antibióticos importantes para la medicina humana. Varias cadenas de restaurantes han seguido su ejemplo.
Y aunque Lumpkins dijo que Sanderson Farms, la tercera mayor empresa procesadora de aves en Estados Unidos, se ha mantenido firme en su postura de no eliminar antibióticos de la producción avícola, la presión para la transición a aves criadas sin antibióticos se está intensificando a través de anuncios, redes sociales mensajes e informes de noticias. El mayor impulso es que los consumidores creen que el pollo criado sin antibióticos es más seguro.
Fuente: WATTAgNet
