En el contexto de un mundo globalizado es fundamental que la industria avícola mundial proteja sus manadas de posibles casos de Salmonella con potencial zoonótico, pues constituyen un problema global con múltiples vertientes, por ejemplo:
- Multirresistencia a los antibióticos
- Brotes de intoxicación alimentaria en el ser humano
- Retiradas de supermercados
- Decomisos de las autoridades
- Barreras comerciales
- Daños a la reputación
Todos estos problemas conllevan la adopción de una legislación más estricta. Esta revisión ofrece una visión general sobre los procesos clave aplicados en producción avícola y las medidas relacionadas que se han revelado fundamentales para reducir la tasa de infección por Salmonella spp. en las empresas avícolas exportadoras de todo el mundo
Múltiples fuentes de infección. Salmonella tiene un período de supervivencia prolongado en el entorno y las aves susceptibles (p. ej., inmunodeprimidas, no vacunadas) están sumamente expuestas a diversas fuentes de infección, lo que hace «imposible» erradicar totalmente la bacteria del entorno.
Los productos avícolas son la principal fuente de toxiinfección alimentaria en el ser humano; la vacunación de las aves se considera una medida importante para aumentar la protección
Las bacterias Salmonella están ampliamente distribuidas en:
- Animales de producción (aves, cerdos, vacas)
- Animales de compañía (gatos, perros, aves ornamentales, tortugas y otros reptiles)
- Roedores (Rattus norvegicus)
- Moscas (Musca domestica)
- Escarabajos del estiércol (Alphitobius diaperinus)
- Ácaros rojos (Dermanyssus gallinae), que también pueden estar implicados en la transmisión de Salmonella.
Asimismo, Salmonella puede circular por toda la cadena alimentaria, desde el pienso, la producción primaria y todo el proceso de producción, hasta los hogares o los proveedores de comida preparada.
Fuente: Avicultura