El uso del análisis de riesgo en sanidad avícola, puede ser muy útil para la toma de decisiones, especialmente en los programas de bioseguridad que implementamos en las granjas avícolas. Se utilizó la metodología científica del análisis de riesgo en la evaluación de programas de bioseguridad, analizando los principales factores de riesgo que enfrenta la avicultura en esta materia.
Se realizó una evaluación de riesgo en una granja de postura comercial en el Occidente de México, identificando como sus principales factores de riesgo de influenza aviar, la prevalencia de la infección en aves migratorias y en granjas comerciales, así como las fallas en el proceso de desinfección y el control en la adquisición de pollita de reemplazo. El sector avícola, subutiliza esta herramienta epidemiológica para evaluar sus programas de bioseguridad, la cual permite identificar factores de riesgo, estimar su impacto y las medidas de mitigación aplicables en la bioseguridad avícola.
Introducción. En los últimos años, los brotes de virus de influenza aviar altamente patógena (IAAP), han causado la muerte de millones de aves en muchos países. Una comprensión adecuada de la dinámica de transmisión y de los factores de riesgo para la propagación epidémica de estos virus, es la clave para diseñar estrategias de prevención y control eficaces (1) y una de las áreas de aplicación de esta evaluación epidemiológica, es el proceso de bioseguridad (4) que se establece en las granjas avícolas, con el objetivo principal de evitar la introducción, establecimiento y difusión de enfermedades, así como su control y erradicación.
La bioseguridad avícola, es un conjunto de prácticas sanitarias diseñadas para prevenir el ingreso, la transmisión y la difusión de agentes patógenos, que puedan afectar la sanidad, la producción y la productividad de las aves. La bioseguridad, es una parte fundamental de cualquier empresa avícola, ya que puede facilitar un incremento en los rendimientos económicos. A partir de los años 90´s, la bioseguridad se vio fortalecida por el empleo de nuevas herramientas sanitarias: Buenas Prácticas de Producción, Buenas Prácticas de Manufactura, Sistema de Análisis de Peligros y de Puntos Críticos de Control y el uso del Análisis de Riesgo (2, 3) en sanidad avícola.
La principal finalidad del análisis del riesgo asociado a la evaluación de las medidas de bioseguridad avícola, es proporcionar a las empresas un método objetivo y justificable para evaluar los riesgos de enfermedades asociadas a cualquier tipo de producción avícola, sus productos, material genético, alimentos, productos químicos y biológicos, entre otros (3).
En términos generales, la bioseguridad debe ser analítica, flexible y adaptarse a los factores de riesgo identificados en cada unidad de producción tecnificada, lo que significa que paralelamente al establecimiento de las medidas de bioseguridad, es necesario realizar una evaluación epidemiológica y de riesgo en la granja, con la finalidad de identificar los peligros físicos, químicos y biológicos, así como los factores de riesgo (introducción, exposición y consecuencias), sus probabilidades de ocurrencia y las medidas de mitigación necesarias para evitar la presentación del evento adverso (2, 3) en la granja avícola.
La bioseguridad, es un concepto complejo, debido a que implica lo referente a la localización física de la granja (bioseguridad física) (4), al diseño de la granja (bioseguridad estructural) y por supuesto a todos los factores de riesgo sanitarios potenciales (bioseguridad analítica y epidemiológica), con lo cual podemos lograr el concepto de “Bioseguridad Integral”, basada en modelos de simulación.
Referencia: http://bit.ly/2uGJq1J