Advertencias generales sobre las vacunas: La vacunación es parte del programa en el control y prevención de enfermedades de los pollos, siendo por lo tanto una operación sumamente importante y delicada. Los pollos son vacunados normalmente contra el gumboro y newcastle, con el objeto de que el organismo produzca defensas que los protegerá contra estas enfermedades.
La vacuna previene, no cura. Una vacuna, no sustituye en ninguna forma las buenas prácticas de manejo. Vacunar aves completamente sanas, si acaso presentan problemas respiratorios o cualquier otra enfermedad, consulte al especialista. Los pollos fatigados o sometidos a tensión, no responden bien a la vacunación y por ello hay que extremar el cuidado antes, durante y después de la vacunación.
Por ningún motivo, permita que guarden los frascos vacíos usados. La vacuna contiene virus vivo, lo que puede producir un contagio directo para los pollos que no están vacunados, sino se tienen las precauciones necesarias. La vacuna debe ser almacenada, transportada y administrada, según las instrucciones aquí detalladas, para evitar fallas en la vacunación.
Vacune el día señalado en el programa de manejo o en el registro de producción. Salvo circunstancias de fuerza mayor se suspenderá o se postergará la vacunación.
Vacuna gumboro: se usa un solo tipo de vacuna, que se la realiza como primera vacunación y la segunda como refuerzo, ambas aplicadas bajo el método de agua.
Vacuna newcastle: se utiliza la cepa B1 y la cepa Lasota, que es más fuerte que la primera. En este programa usamos como primera y única vacuna de newcastle la sota bajo el método de aplicación al agua.
El tiempo que debe transcurrir entre la primera y la segunda vacunación dependerá de la clase de vacuna, la vía de la administración, la edad de los pollos y condiciones de riesgos.