El objetivo de este artículo es resaltar la importancia del diagnóstico de laboratorio y su correcta aplicación en la Medicina Basada en Evidencias (MBE). La MBE se define como el uso consciente, explícito y juicioso de la mejor evidencia científica disponible para tomar decisiones sobre los pacientes%u2019 (Prof. David Sackett) [1], en este caso los pacientes corresponden a los sistemas de producción porcina.
En la MBE se destaca la importancia del examen de las evidencias procedentes de la investigación científica y resta importancia al papel de la intuición, de la experiencia clínica no sistemática y del razonamiento fisiopatológico como motivos suficientes para tomar decisiones clínicas. La MBE se ha definido también como la integración de la experiencia clínica individual con la mejor evidencia externa disponible procedente de la investigación sistemática [2]. Donde la experiencia clínica se refiere a los conocimientos y juicio que cada Veterinario adquiere en su práctica profesional y la evidencia externa se basa de las ciencias básicas, la investigación clínica y la precisión de las pruebas diagnósticas, ambos aspectos son necesarios para un correcto diagnóstico y la toma de decisiones que ayude a la identificación del problema. En la práctica porcina los tiempos de respuesta son importantes y es común que tengamos que tomar decisiones inicialmente basados en nuestra experiencia clínica, normalmente nos enfrentamos a cuadros complejos con la presencia varios agentes interactuando con el manejo, el ambiente y el sistema de producción, será importantes dar respaldo científico que soporten el tratamiento confirmando con evidencia el diagnóstico clínico realizado y justificar el tratamiento dado o hacer las correcciones pertinentes.
Proceso de diagnóstico
En el diagnóstico alude, en general, al análisis que se realiza para determinar cualquier situación, esta determinación se realiza sobre la base de datos y hechos recogidos y ordenados sistemáticamente, que permiten juzgar mejor qué es lo que está pasando y establecer estrategias y medidas de control y prevención para cada explotación.
Etapas del diagnostico
La primera parte del diagnóstico es la investigación clínica en esta etapa se recoge los datos clínicos y epidemiológicos y se realiza un diagnóstico presuntivo, consta de 2 etapas:
- Etapa inductiva consiste en contestar ¿Quién tiene qué, donde, cuándo, desde cuándo, cuantos y cómo?
- Etapa deductiva donde se establece la hipótesis de la causa del problema.
La investigación clínica es clave y la totalidad del diagnóstico posterior depende de su calidad.
La segunda parte arranca cuando la investigación clínica no es suficiente para obtener el cuadro completo de lo que está ocurriendo es complementada con análisis de laboratorio, así se confirma o descarta la participación de diferentes agentes infecciosos o toxinas específicos.
Los análisis de laboratorio serán de gran ayuda para establecer un diagnóstico definitivo de una enfermedad o problema de sub-producción, un diagnóstico correcto y preciso permite establecer medidas de control con una alta probabilidad de éxito y siempre será más barato el costo de los análisis de laboratorio a las pérdidas causadas por enfermedad manifiesta o producción sub-óptima de las que no se tiene un diagnóstico adecuado.
Usos de las diferentes pruebas de laboratorio:
- Detectar patógenos o toxinas.
- Evaluar el status de la infección (exposición de los individuos o poblaciones)
- Estimar porcentaje de granjas o cerdos positivos.
- Monitorear la respuesta serológica de una población.
- Monitorear el progreso y el éxito de los programas de control o de erradicación de enfermedades.
Para la correcta muestra se debe:
- Elegir el/los animales representativos del problema y las muestras que se enviaran.
- Tomas de muestras adecuadas y correcto envío de laboratorio.
- Conocimiento de las pruebas de laboratorio y sus interpretaciones.
TOMA DE MUESTRAS
Selección de los animales para necropsia
Una necropsia realizada adecuadamente nos puede dar mucha información de la enfermedad, las lesiones macroscópicas encontradas nos proporcionan un diagnóstico del caso, pero muchas veces se requieren análisis adicionales para obtener un diagnóstico definitivo. La elección de los animales será crucial se debe seleccionar de la fase aguda de la enfermedad (las primeras 24-48 horas) con los signos clínicos característicos a los observados en el lote, las muestras deben ser frescas por lo que se recomienda la toma de muestras sea de animales sacrificados y que no estén tratados cuando menos parenteralmente si se pretende realizar exámenes específicos como la bacteriología.
Muestras de Sangre
La sangre se debe de tomar en vivo o justo después de la eutanasia cuando el corazón aun late.
En vivo la sangre se toma de:
- Vena cava anterior (lechones 0 a 60 días de edad).
- Vena yugular (engorda, finalización, hembras y machos adultos).
- Venas de las orejas y cola (adultos).
Las muestras de sangre para análisis hematológico se deben recoger con tubos con EDTA de sodio o heparina de litio, aunque también sirven para la mayoría de los test serológicos y bioquímicos. En caso de las pruebas serológicas en busca de anticuerpos se debe enviar únicamente suero clarificado sin adicionar ningún tipo de conservador y en refrigeración.
Histopatología
Para histopatología las muestras de tejido se deben de fijar en formol tamponado al 10% y conservar a temperatura ambiente, la proporción de formol tejido debe ser 1:10 en recipientes claramente identificados y con muestras de un solo animal por frasco. Las muestras del tejido deben ser de 0.5 cm de grosor incluyendo áreas afectadas y no afectadas en el corte. El cerebro y el globo ocular se fijan intactos. El intestino se sugiere incluir varias porciones abriéndolas longitudinalmente antes de fijarlas.
Técnicas de microbiología, virología y moleculares
Las muestras de sangre, orina, saliva, leche, líquido cefalorraquídeo o de tejidos se deben de tomar de forma aséptica para su cultivo, análisis viral o test de PCR. Para las muestras de tejido se recomiendan enviar una porción grande del órgano ya que permite que el laboratorio tome muestras asépticas. En casos de necrosis o exudados se pueden tomar muestras de lesiones con hisopos. Para los intestinos delgado y grueso se deben enviar porciones sin abrir y con los extremos anudados. Conservar individualmente en bolsa o recipiente para evitar contaminación.
Toxicología
Dado que existen una amplia variedad de compuestos tóxicos las muestras pueden incluir tejidos (hígado, riñones y encéfalo), sangre suero, contenido gástrico u orina de los animales.
En otros casos, se pueden analizar el alimento o el agua para encontrar toxinas.
Parasitología
Se pueden enviar heces para análisis por flotación fecal en el caso de parásitos intestinales. Se debe tomar musculo de lengua, diafragma, intercostales y masetero en caso de sospecha de cisticercosis o triquinelosis. Raspados cutáneos o de oreja para confirmar sarna.
Perfiles genéticos
Normalmente la muestra es sangre.
Muestreo de la población animal
En cualquier muestreo se debe definir el objetivo del muestreo, la información que queremos obtener y como nos va a ayudar en la toma de decisiones, siendo eficientes con los recursos. Es común que realicemos perfiles con los cuales sigamos confirmando lo que ya sabemos, o que con la información obtenida no tomemos ninguna decisión.
ENVÍO DE MUESTRAS
La calidad y el valor de los resultados de laboratorio dependen de la toma, envío y procesado correcto de las muestras, las muestras deben de ir acompañadas de la siguiente información:
- Fecha de la toma de muestra.
- Identificación.
- Datos de contacto.
- Origen de la muestra.
- Tipo de muestra.
- Historia clínica del animal/explotación.
- Descripción del problema actual.
- Hallazgos a la necropsia.
- Tratamientos.
- Sospecha clínica.
- Solicitud de análisis.
Además se debe de considerar el tiempo desde la toma de muestra hasta su recepción del laboratorio, en general se sugieren menos de 24 horas en todas las muestras que se envíen refrigeradas con excepciones como son muestras de hisopos de meninges y orina que deben estar en el laboratorio en 12 y 6 horas respectivamente y deben ser transportadas a 4°C, se deben enviar refrigeradas muestras para Bacteriología, Micología, Virología, Serología y Parasitología. Muestras que se deben mandar congeladas son para Biología Molecular y cuando mandamos para serología solamente el suero.
Para Histopatología se deben de mandar en formol tamponado al 10%.
En el marco de la MBE es importante recordar que la precisión del diagnóstico depende de la correcta interpretación de los resultados obtenidos de las evaluaciones clínicas, epidemiológicas, hallazgos patológicos y pruebas de laboratorio. El veterinario debe conocer a fondo las técnicas usadas ya que es el quien debe definir las muestras a tomar, las pruebas a realizar y la interpretación. El diagnóstico del laboratorio forma parte de la MBE, ya que nos permite tomar las mejores decisiones fundamentadas y sistemáticas relacionadas al control y tratamiento de un problema clínico dentro de los sistemas de producción porcina.
Fuente: Agro Meat